miércoles, 27 de agosto de 2008

Espacio exterior

En estos días de tanto ajetreo, de catástrofes aéreas, de muertos, de guerras y qué sé yo, cómo se echa de menos una tranquilidad como la que disfrutan los tripulantes del Discovery a cientos de kilómetros de la superficie terrestre. Ya lo he dicho pero no me importa repetirlo: qué poquita cosa somos y lo creído que nos lo tenemos...

No hay comentarios: